Mucho se habla de que las marcas deben acercarse a sus consumidores y clientes en la Web 2.0 y “dialogar” con ellos. ¿Pero cuál es la mejor forma de hacerlo? Depende de la marca, sus objetivos y el presupuesto, entre otros factores. No es lo mismo una marca de zapatillas que una bebida o un programa de TV.
El caso de Sushipop es un buen ejemplo. La empresa de delivery de sushi más económico fue fundada por dos jóvenes de 27 y 25 años que entienden a la perfección, por una cuestión natural generacional, pero también por haberse animado a emprender ese tipo de negocio, cómo aprovechar el poder comunicacional de las redes sociales en favor de su negocio. Y así lo hacen.
En tercerclick se armó una fanpage en Facebook que, en poco más de un mes, ya cuenta con 8300 fans que interactúan todos los días con preguntas, reclamos, pedidos, críticas y elogios. Desde la marca, responden a todas las consultas, se contacta personalmente a los usuarios que se quejan por algo puntual y también se le dan a los miembros beneficios tipo promoción (por ser miembro de la fanpage, te dan una cerveza sin cargo junto al pedido).
Hace algunas semanas se organizó un concurso de fotos, que consistía en subir una imagen que reflejara el momento Sushipop de los usuarios. El autor de la foto más votada (con la herramienta “me gusta”), ganaría 500 piezas de sushi para Navidad o Año nuevo. El segundo puesto, 300 y el tercero 150 piezas. La condición era que en todas las fotos debía aparecer la marca Sushipop. Los usuarios subieron más de 70 fotos y la ganadora recibió 213 votos. Muchas de ellas eran de amigos que compartían con el resto de la comunidad su momento comiendo sushi. De esa manera, la marca fue puesta a disposición de los usuarios para que jueguen con ella, a partir de la creatividad, la diversión y el uso de herramientas como el Photoshop. Una buena manera más de hacer branding y acercarse a los usuarios en su mundo.
Estas son las tres fotos ganadoras:
más fotos del concurso:
muy buena idea!
esa comida me hace acordar a Loperfido que horror
Está buena la idea, igual al final siempre lo que más garpa es la calidad del producto.